lunes, 1 de mayo de 2017

Mariano y los alienígenas...

Se acercó amable, cálido, mimoso,
un ojo en el cogote, otro en la frente,
y me observó pletórico, dichoso. 
.
En un primer momento enseñó un diente,
a modo de feliz presentación,
que a mí se me antojó grandilocuente.
.
Adujo, sin embargo, la intención
de conocer indicios de un humano
famoso entre las féminas de Orión.
.
De nombre, comentó, un tal Mariano,
de rostro sibilino, exasperante,
mediocre, miserable, puritano.
.
Y convine conmigo, en un instante,
(en mi mundo locuaz y sempiterno),
que sería feliz dando el portante,
al necio Presidente del Gobierno.
.

No hay comentarios:

Publicar un comentario