sábado, 29 de marzo de 2014

Abuso

Soy mujer, y en este serlo, convive mi vida entera.

Por laberintos de la memoria quedaron sepultados años de vida. La cerrazón de entonces y la de ahora semejan la ignorancia de los tiempos.

Entonces fueron años de vileza, miedo y desesperanza. Temor al absurdo de unos parias, al cambio, al machismo arraigado, a la mudanza de ideas. Siempre el miedo vibrando, miedo siempre.

Vuelve el abuso como un boomerang, arrasando con todo, antojadizo y vinculante. Vuelve disfrazado de trompeta.

Vuelve lo más feo de lo antiguo, matando la belleza. Vuelve lo mezquino, lo roñoso, lo anquilosado, lo obsoleto. Vuelve la estulticia, la torpeza.

Vuelve, vuelve, vuelve… Tremenda desazón que nos destruye.


Flota etéreo el arte, y las ideas, la inteligencia, la ciencia… a la espera de un mundo más auténtico.

martes, 25 de marzo de 2014

Al Romance.

Quiero que los versos bailen
rizando el aire con ellos,
que compongan unos giros
con puntos, comas y acentos.

Quiero que brote la música,
que el romance sea de fuego,
que brinquen las letras, vuelen,
con tinta de color negro.

Quiero pedirle a la luna
rebosante de destellos,
le inyecte luz al poema
con su mirada de hielo.

Quiero que el romance cante,
que se olvide del soneto,
que entone las ocho sílabas
de que consta cada verso.

Que sus rimas asonantes
lo sean sin aspavientos,
que nada quede en el aire,
que se ajusten los octetos

Quiero escuchar melodías,
que el susurro de los versos
hagan vibrar las palabras
y silben un aria al viento.

Tanto quiero, quiero tanto,

que me derrito queriendo.

jueves, 20 de marzo de 2014

POLVO (Soneto Alejandrino)

Camino ensimismada, perdida por el mundo,
buscándome en el rastro que libera la calma;
mas soy polvo del polvo, empolvada hasta el alma,
dejando por la tierra un polvorín rotundo.

Nada saben las huestes de mi amado submundo
(el que teje mis neuras, el guardián de mi drama),
que exista un Dios reinante, ni siquiera una llama
que alumbre el desatino de un vivir moribundo.

De nada sirven letras ni acudir a versados.
De nada la riqueza ni ser buen ermitaño.
De nada los boatos de misa, cruz, rogados.

Es tan desconcertante la vida de un castaño,
como el trino sublime de pájaros dorados,

que arrincono el tormento de ahondar el engaño.

lunes, 10 de marzo de 2014

Cerebro

Tratando de justificar el comportamiento de un indeseable, salieron estos versos:

Inmersa en el cerebro de un matón,
deambulo indagando en su guarida
la prueba irrefutable, alguna herida
que me inste a comprender la sinrazón.

Encuentro, ¡vive Dios! en un rincón,
la tecla que chirría, la homicida,
que oculta la neurita pervertida
blindada por esbirros de cartón.

Y convengo conmigo que es el coco
el culpable de mucho desatino,
pues nada le detiene si está loco.

Mata un día tras otro, el asesino,
creyéndose gigante y no tan poco.

En manos del azar está el destino