lunes, 9 de marzo de 2020

El primer verso pertenece al último de una cadena erótica...


"Se subliman; y el alma entera grita"
cuando se altera el pálpito cardiaco
y tu arrebato impúdico me excita;
cuando gimes, mi amor, como un cosaco.
.
La caricia sensual, concupiscente,
que se mece a placer y que no para…,
ese ir y venir, esa creciente
y gozosa fruición que se dispara…
.
El beso alucinógeno y errante
recorriendo epicúreo el mausoleo
(abierto para ti de par en par).
.
Y el éxtasis final, alucinante,
con el vértigo en todo su apogeo
brindándonos la dicha de volar.
.

2 comentarios:

  1. Es un excelente trabajo, ¡felicidades, poeta...!
    Un abrazo.

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