De niña yo quería ser mayor;
mas hoy, ya de mayor, quiero ser
niña*;
es que se me atraganta la morriña
de aquellos días llenos de esplendor.
.
Y, sin embargo, miro alrededor,
y se alborota el alma si escudriña
los almendros en flor de la campiña
donde canta el alegre ruiseñor.
.
Estoy casi al final de mi existencia,
y nunca sospeché tal complacencia.
.
No imagino otra vida más feliz
que la misma que estoy viviendo ahora:
todo lo que contemplo me enamora
y no sangra ninguna cicatriz.
.
*quiasmo
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