Me estremece la luz
de amanecida;
al percibirla, brota
la emoción
de encontrarme, de
nuevo, en comunión
con el pálpito
intenso de la vida.
.
Y el único propósito
suicida
que alberga mi indomable
corazón
es sentir, a menudo,
tentación
de enredarme en la
música prohibida.
.
Me asomo al año nuevo,
entusiasmada,
consciente de su
efímera existencia,
dejándome llevar por
su espiral,
.
por su mágica
incógnita ofertada;
sin agobios, sin cargos
de conciencia,
disfrutando de todo
su caudal.
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario